jueves, 28 de noviembre de 2013

El príncipe pendejo (Ríase un poco)


Hace poco tiempo vivía en una torre videovigilada un pendejo que no se había enterado que era un príncipe

- Sniff, si tan sólo el destino pudiera cambiar mi suerte

Repentinamente escucho los aleteos de lo que parecía un mosquito gigante, así que tomo su lata de Baigon y comenzo a fumigar hasta que escucho a alguien tosiendo de manera continua y sonora

- ¡¡Cof, cof, cofr, basta ya estúpido!!, ¡¿que no te diste cuenta que soy tu hada madrina?!

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