martes, 5 de noviembre de 2013

Cómo manejar un vehículo seguro/a en tiempo de crisis y sin estrés




Latinoamérica (no sé si también España) es una de las regiones del mundo donde se dan mayores accidentes de tráfico, en gran medida por el acerbo cultural heredado de mala manera hace quinientos años. Igualmente existe el ridículo debate entre quien maneja peor entre hombres y mujeres, algo en lo que no voy a entrar en detalle porque lo considero meramente secundario; yo he visto pésimos choferes de ambos sexos. Quizá la solución sean esos autos que se manejan sólos por medio de una computadora y que paran cuando sus sensores lo indican, pero creo que eso no hubiera sido necesario si fuéramos mejores al volante; es más todavía está en fase de experimentación, así que mientras el auto fantástico de David Hasselhoff aparece,  voy a darles unos cuantos tips de manejo. Si igualmente quieres seguir manejando como troglodita, ya eso es decisión personal tuya.

1. Antes de subir al volante ten en cuenta que hay dos tipos de vehículos, los automáticos y de cambio. En el vehículo automático, basta con usar los frenos y ajustar las velocidades con una palanca que va de atrás hacia adelante. En el caso de vehículo de cambios, recuerda que antes de arrancar tu auto debe estar en neutral y que antes de cada cambio debes pisar el freno seguido del embrague; ve primero en la primera fuerza y dependiendo de lo que necesites cambia de segunda, tercera o reversa; debes pisar el acelerador cuando el cambio te lo permita (en el caso de Europa, no tienes más remedio que usar este tipo de auto y ser o muy flexible o pequeño para caber en su interior)

2. Evita calentar el motor por más de cinco minutos, pero si no te preocupa el calentamiento global al menos piensa en la cantidad de gasolina que gastas cada vez que haces algo así.

4. Verifica que tu auto esté en perfectas condiciones (llantas no tan gastadas, el motor funcionando como Dios manda, que tenga suficiente aceite, líquido de freno, refrigerante, etc...), te ayudara en la maniobrabilidad de tu vehículo además de ahorrarte la gasolina. Ejm: un auto mal alineado si bien es muy probable que no se parta en dos, no acelerara como tú quieres porque seguramente sus neumáticos no van en línea recta o la barra estabilizadora no logra mover óptimamente los engranajes que permiten al motor llevar movimiento a las ruedas; no tener frenos te haría imposible reducir la velocidad o salvarte de imprevistos y un motor en mal estado hará que gastes inútilmente en gasolina para aumentar la potencia de tu vehículo.

5. Mantén tus papeles en orden, recuerda que en determinadas regiones del planeta no hacerlo te hace ganar una infracción; en mi país eso significa además de la infracción, que te lleven tu auto con grúa a un lugar que tal vez no lo veas más nunca.

6. Antes de frenar ante cualquier eventualidad, verifica si tienes un auto detrás tuyo; frenar repentinamente puede poner desprevenido a cualquier chofer apenas dándole tiempo para reaccionar.

7. Sigue las señales de tránsito, estas reglas no fueron algo fortuito o un invento de algún político/a; son normas universales estudiadas y comprobadas que a menudo varían de simbolismo de país en país, pero a la larga siguen lo mismo; son como reglas del juego para evitar que se salga de control. Imagínate si en un juego como el rugby no se siguiera ninguna.

8. Si eres principiante acompáñate de una persona diestra en el manejo los fines de semana, vete al lugar apropiado y comienza a practicar; en un país como el mío no tienes más remedio que comer tráfico, ya de por sí eso es una buena escuela, pero espero que no sea tu caso.

9. Nunca te excedas de la velocidad indicada en las señales, recuerda que no es lo mismo manejar en una ciudad que en carretera abierta donde hay más espacio para maniobras y puedes ir a cierta velocidad. Conducir a una velocidad inadecuada puede causar que a la hora de cualquier imprevisto o maniobra delicada tengas una mayor posibilidad de perder el control de tu vehículo.

10. Siempre procura usar el carril de velocidades sólo si vas a rebasar, recuerda que en la autopista tienes que ir a la velocidad indicada. Deja las maniobras bruscas a los dobles de las películas o a los pilotos de fórmula uno.

11. Al cambiar de carril hazlo calculando la distancia de los vehículos que ocupan el otro paño, la distancia entre ellos, su velocidad, además del momento preciso y la rapidez con la que debes hacer tu maniobra. Nunca hagas ese tipo de maniobra con la nariz del auto del otro carril muy cerca de tu maletero, si alguna persona pasa en su moto por el centro de la calle, si en tu carril hay muy poca distancia entre los autos como para hacer maniobras o si hay muy poco espacio en el otro carril para poder lograr el cambio. Se ha comprobado que la mejor forma de manejar es a la defensiva.

12. Siempre en lo posible has los altos donde el letrero ese lo indica, generalmente se encuentran en las bocacalles que dan a una vía principal, también has el alto cuando la luz se pone roja. Cuando la luz cambia a verde no arranques de una vez, espera cuatro segundos y arranca a primera velocidad acelerando de forma gradual. Este principio existe porque siempre hay algún/a troglodita que le gusta pasarse la luz roja.

13. Las luces amarillas de los semáforos significan que debes moverte más lento, no necesariamente seguir adelante. Recuerda lo que escribí anteriormente sobre los cambios de velocidad bruscos; aunque si te pasaste por centímetros la luz roja o cuando la amarilla aún no cambia, puedes seguir adelante, porque un frenazo demasiado inoportuno o detener el auto en una posición incómoda podría no sólo causar un accidente, sino detener el tráfico.

14. Aminora la velocidad de forma prudente cuando te vas acercando a las líneas de seguridad, esto le permitirá a los transeúntes caminar sobre ellas, pero si las rebasas por completo puedes volver a tu velocidad normal, siempre pendiente de lo que hay a tu alrededor.

15. Usa las luces intermitentes sólo si tu auto está dañado o vas a realizar una parada de emergencia. No lo utilices para detenerte de forma arbitraria, perjudicarías al tránsito vehicular y te expondrías a un accidente.

16. Las bocinas de los autos deben ser el último recurso que debes usar en tu arsenal, sus sonidos nunca son agradables. Úsalas de forma prudente para llamar la atención a algún conductor/ora distraído (con un bocinazo leve), ahuyentar a algún transeúnte que aparece en tu campo de visión de forma furtiva o inclusive si algún vehículo proveniente de un camino lateral no ha notado tu presencia al entrar en la vía principal; si tienes que subir el volumen hazlo de manera gradual y cuando es completamente necesario. Una particularidad es que en mi país la bocina la usan hasta para apurar a la novia para que se vista rápido.

17. Antes de cambiar de carril, además de ver el retrovisor gira la cabeza de forma lateral a la dirección donde quieres cambiar, porque hay algo que en la jerga de tránsito llamamos el punto ciego, que es el espacio lateral que no puedes abarcar con un retrovisor pero no necesariamente significa que no haya un auto allí.

18. Si vas a ir a un lugar, ve con suficiente tiempo de anticipación; el tráfico no perdona y los imprevistos están a la orden del día. Así evitaras manejar como demonio para ir a algún lugar, sólo porque saliste de tu punto de partida tarde.

19. Si aún te confunde la dirección de un lugar, el GPS y el Google maps son la mejor solución. Nunca olvides que ya estamos en el siglo veintiuno.

20. Jamás rebases en una curva, a menos que sea muy abierta; corres el riesgo de perder el control del vehículo.

21. Usa el cinturón de seguridad incluso si estás en los asientos de atrás, ya que está científicamente comprobado que el cuerpo humano es propenso a sufrir lesiones hasta con accidentes leves. Estos cinturones son probados por muñecos en pruebas de seguridad de todo el mundo y los mejores son los hechos de fábrica, así que asegúrate de que tu auto venga con ellos, porque si no es así la estafa está garantizada. A los niños/as de menos de cinco años hay que sentarlos en sillas especiales con cinturones incluidos.

22. Hay que mantener la calma después de un accidente y asumiendo que se sobrevivió; un ataque de pánico o un arranque de furia evita que se pueda pensar con claridad trayendo graves consecuencias.

En fin, creo que tendré que publicar una segunda parte porque me di cuenta de que hay mucho que abarcar y la gente en internet siempre está muy apurada a la hora de leer. Lo más curioso del caso es que el día que estaba escribiendo esto tuve un accidente; un anciano en un todoterreno me chocó por detrás e hizo que como efecto dominó destrozara parcialmente el bumper de una camioneta todoterreno que quedo menos mal que el auto de mi hermana, o sea el que yo manejaba; los dos estábamos detenidos frente a un semáforo en rojo. Yo tenía más de un año que no me sucedían accidentes de tránsito pero esto fue fortuito.

Es más, casi se llevan el auto de mi hermana a un corral porque lo tenía todo menos el registro vehicular del auto, ya que ella había olvidado poner la copia en la guantera. Esto me enseña que hay accidentes que no se pueden evitar por más que uno quiera y si hubiese sido un trailer seguramente no hubiera terminado este artículo hoy. Es muy probable que si me hubiera tocado morir ese hubiera sido mi día, porque el destino es así de caprichoso.

Lo que más me dio rabia es que me iban a decomisar a mí el auto sólo porque me faltaba un papel, en cambio al viejo que causo el accidente no le quitaron ni la licencia ni el auto.

Creo que en este tipo de casos si podría dar un pequeño tip: si te va a chocar un trailer a toda velocidad por detrás y no están pasando ni fantasmas en el carril al lado tuyo, sal de allí antes de que sea demasiado tarde; es mejor perder un auto que la vida. Hago constar que este tipo de medidas son mucho más difíciles de tomar si hay pasajeros en el auto.

Hasta la segunda parte.


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